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Nadie es famoso del todo hasta que no le imitan, o al menos, eso es lo que suele decirse. Desde luego, Miley Cyrus ha conseguido su fama a pulso, a medias por su carrera como actriz y cantante, conocida en todo el mundo por esa faceta, y también por la otra, la de rebelde sin causa, chica desbocada que salta de polémica en polémica.Miley se apropió de ese dicho que confirma que lo importante es que hablen de uno siempre, para mal o para bien, pero que hablen.
De esta forma, la otrora chica Disney ha conseguido estar permanentemente en boca de todos con sus locuras, travesuras y polémicas, que han sido portada de muchos medios de comunicación.Su popularidad ha llegado a tal punto que incluso en la televisión de España se han decidido a imitarla con su último gran éxito, una canción pegadiza y sensual en la que Miley luce todos sus encantos, baila, canta y provoca a todos los que tiene cerca.
Lo gracioso de la imitación es que era un hombre, el presentador Arturo Valls, el encargado de hacerla.Obviamente, la gracia estaba servida, y ver a un tipo tratando de cantar y bailar provocativamente como Miley Cyrus es asegurarte las carcajadas. El pobre Arturo lo intentó hacer lo mejor que supo, y desde luego, cumplió el objetivo de hacer reir a todos.
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